Dos rebanadas de pan de molde, un salero, un plato y un despertador. Con apenas trece años la niña siente temor ante el castigo al que va a enfrentarse. Más le valía haber obedecido. Hija de padres progres y ateos. Ella es la niña de nadie.
Tienes un minuto para comerte el pan con sal. Empieza!!!